Hay cuatro canchas de césped, una de ellas es de césped artificial y otra es multifuncional. Los «búhos» rompían así una racha de 56 años sin ganar un título oficial, y ese mismo curso obtendrían el ascenso a la máxima categoría. Durante los años 1960 el estadio fue remodelado, aumentando su capacidad hasta los 80.000 espectadores, y también fue en estos años en los que llegó desde el FC Oporto el entrenador húngaro Béla Guttmann.
